¿Quiénes ganan y quienes pierden con la Independencia de Cataluña? Un Análisis Económico

Que el decrépito y pútrido régimen del 78 está acabado es obvio como ya comentábamos en otro post. Sin embargo, la crisis que parece que va a dinamitarlo del todo es la territorial. En esta entrada, analizo desde una perspectiva coste-beneficio la independencia de Cataluña. Para ello,  reviso las dos visiones contrapuestas que tienen los economistas posicionados a favor y en contra, así como los resultados que arrojan los diferentes modelos económicos que han tratado el tema, sus supuestos, etc.  En segundo lugar, analizo los cambios que se producirían en la política fiscal del nuevo estado Catalán. La idea de esta entrada, es resaltar las claves económicas necesarias para formarse una opinión totalmente neutra sobre los ganadores y perdedores de un eventual proceso de independencia.

Costes y Beneficios de la Independencia de Cataluña

Para poder realizar un análisis de los costes y beneficios de la independencia catalana tenemos que identificar los factores relevantes para ello. Aunque se podría profundizar más, hay dos que son especialmente destacables y que van en direcciones opuestas: las transferencias fiscales y el “efecto distancia” en el comercio.

Cataluña, hasta la fecha, está integrada en un sistema fiscal más amplio perteneciente al Estado Español y como es una región relativamente más rica que el resto de comunidades (un 22.9% ), sus contribuciones son también mayores. Así, siguiendo esta lógica, si no hubiese transferencias de Cataluña hacia el resto de España (el llamado expolio fiscal), Cataluña sería más rica.  Este es posiblemente el argumento económico de mayor peso a favor de la independencia de Cataluña en el corto plazo, y es que las aportaciones que realiza al conjunto de España son muy elevadas. ¿Cuánto más rica sería una Cataluña independiente? Si fuese independiente contaría con un 5.8-8.4% de PIB adicional para sí misma (en función de si se excluyen o no los subsidios de desempleo). Esto en euros por persona equivale a unos 2.260€ más por catalán tal y como muestra el Gráfico 1.

                                            Gráfico 1: Las Ganancias Fiscales de la Independencia

Saldos

                                                Nota:Elaboración propia con datos de la Generalitat

El otro factor clave para valorar la independencia, es lo que en economía internacional se denomina ‘’efecto distancia’’ en el comercio. Hay que recordar que el intercambio comercial (de recursos, productos, dotaciones factoriales, etc) es beneficioso para todos los que participan de él,  puesto que permite economías de escala (a través de la integración de los mercados) y mejora productividad global (a través de la especialización, las transferencias de tecnología y conocimiento, etc). El punto clave aquí es que el comercio mundial (salvando algunas excepciones para las que el ajuste de los datos no es bueno) sigue el modelo de gravitación de Newton: el comercio entre dos países cualesquiera, aumenta con el producto de las masas económicas y disminuye con la distancia entre estos países. Pero la idea distancia en economía es algo más compleja, no es meramente física y abarca también factores culturales (lingüísticos, étnicos, etc), regulaciones arancelarias y fronteras.

Este efecto distancia es el elemento sobre el que existe un mayor incertidumbre y debate entre los economistas. Las cuestiones abiertas son las siguientes. ¿Cuánto aumentaría la distancia entre Cataluña y España en el caso de introducir una frontera? ¿En que plazos se materializaría este efecto? En función de lo que asumamos sobre la relación comercial España-Cataluña en el futuro, el resultado será diferente. No es lo mismo que la distancia aumentase al par España-Australia a que dicho aumento se quedase en el equivalente España-Portugal. Tampoco es lo mismo, que tras la ruptura el efecto distancia se materializase en un brusco shock comercial (típico de los periodos de guerra) a que el escenario fuese el de un aumento paulatino de las distancias.

Lo más razonable es asumir, que como mucho, la distancia económica entre España y una Cataluña independiente no superaría (ni en el largo plazo) la que hay entre España y Portugal. Por varios motivos: compartimos idioma, gustos, redes sociales, etc, y aunque se perdiese el marco regulatorio común y se levantasen aranceles, parece difícil pensar en una situación de más lejanía que la que hay con Portugal, país con el que no se comparte el idioma. La intensidad de las interacciones económicas actuales se muestran en la Tabla 1:

Tabla1

Nota:La interacción se define como la suma de las exportaciones y las importaciones con España. Los datos están expresados en %.

Como puede observarse (y era de esperar) la interacción económica actual entre España-Cataluña es mucho más intensa que España-Portugal por el efecto frontera. El volumen de los intercambios entre Cataluña y España es del 11.3% del PIB conjunto de las dos regiones, mientras que con Portugal es del 2.5% de su PIB conjunto.  Si sólo tenemos en cuenta el PIB de Portugal o Cataluña (segunda fila), vemos que el valor de los flujos comerciales entre Cataluña-España ascienden a un 60.7% del PIB catalán, mientras que los flujos Portugal-España suman un 17.3% del PIB portugués.  Finalmente, si nos fijamos en la interacción relativa que se da a nivel exterior, vemos que Portugal es mucho menos dependiente de España que Cataluña.

Con estos datos podemos esperar, que incluso en el peor de los casos, el volumen de intercambios Cataluña-España no caería más de un 80%. Esta caída extrema, que supondría una merma  de casi un 9% del PIB catalán si la relación Cataluña-España pasase a ser igual a Portugal-España, hay que contextualizarla temporalmente. Si todo lo demás se mantuviese constante y la caída se diese en 1 sólo año, Cataluña perdería. Sin embargo, lo razonable es que esa caída del 80% tardase un tiempo materializarse. Asumiendo que el beneficio fiscal es el 7.1% (promedio 8.4 y 5.8) con un factor de descuento del 2%, vemos que el efecto neto de la independencia es positivo o negativo en función del plazo para el que se converge con la situación comercial España-Portugal. Concretamente, si la caída del comercio se diese en 10 o 20 años Cataluña perdería en la operación, mientras que si se diese en un plazo de tiempo más largo, saldría ganando.

Saldo Neto

Además, es muy poco probable que todo lo demás se mantuviese constante. Lo lógico es que Cataluña buscase nuevos socios comerciales por lo que esta simulación está sobre-estimando el efecto negativo de la distancia para Cataluña. Posiblemente aún cuando la caída del comercio bilateral se produjese en menos tiempo, la operación resultase beneficiosa para Cataluña.

La Redistribución

A la hora de analizar la eventual independencia Catalana, también es interesante plantearse  quien se apropia de los beneficios de la independencia de  Cataluña y sobre quién recaen las pérdidas. Para ello hay que plantearse quien controlará la política fiscal (la redistribución) con y sin independencia. Voy a suponer (todo el ejercicio a continuación es hipotético), que la mejor descripción que puede hacerse actualmente de la realidad social es la del 15M: que no vivimos en democracia, sino en un sistema de gobierno representativo, oligárquico donde dos grupos minoritarios, ricos y políticos, parasitan el Estado (y controlan la política fiscal). Así,  podemos suponer una sociedad estratificada en 4 grupos: los ricos, la clase media, los pobres y los políticos que actúan a modo de parásitos. Además supondré que sus productividades, el peso en la población y la política fiscal por grupos, son las que vienen dados en la Tabla 3 a continuación:

Tabla 3

Nota: los datos de la tabla no son los reales, son una aproximación inexacta.

Sin independencia, asumiendo que en España no se produce una revolución, la Tabla 3 que simplifica las relaciones de producción y distribución social, se mantendría constante en el tiempo. Por el sencillo motivo de que los políticos parásitos seguirían controlando la política fiscal. Sin lograr la independencia, en esta sociedad simplificada, los ricos catalanes que también producen más, seguirían teniendo unos impuestos inferiores al resto del 10% (seguirían utilizando técnicas de ingeniería fiscal para escapar de Hacienda). La clase media, por su parte, seguiría soportando la mayor parte de la extracción de rentas que realizan los políticos parásitos (42 de las 48.75 unidades recaudas). Los pobres también se verían perjudicados ya que sólo recibirían el 85% de lo que les correspondería si la regla de reparto fuese la productividad. La situación de Independencia, en la que el pueblo no es capaz de alterar el status quo de la sociedad catalana no alteraría la situación anterior. Los nuevos oligarcas (CiU, ERC) aunque actuando a otra escala, se apañarían para apropiarse de las rentas.

Ahora bien, si Cataluña se independizara y llevase a cabo un proceso Constituyente democrático, podemos esperar dos tipos de transiciones en función de en qué se centre el proceso.

1) Un proceso constituyente centrado únicamente en el desarrollo de mecanismos de participación política popular provocaría una redistribución de riqueza en la que las mejoras vendrían exclusivamente de la recuperación de las rentas parasitadas por los oligarcas.

2) Un proceso constituyente centrado en mecanismos de participación y en lograr una mayor igualdad social (con mayor progresividad fiscal e introducción de la renta básica universal, dinero electrónico, el reparto del trabajo, etc) que llevaría a una redistribución económica más amplia, donde tanto los parásitos como los ricos perderían prácticamente todo su excedente.

Los resultados distributivos de cada tipo de transición para esta sociedad ficticia, se adjuntan en la Tabla 3 a continuación. Como puede verse, las clases bajas aumentarían entre un 12 y un 9% su posición con respecto a la situación de dependencia española o independencia controlada por oligarcas. Para las clases medias el resultado es del  16% en el caso de una revolución democrática y del 23% en el caso de una revolución democrática y social.

Tabla4Nota: No se tiene el efecto del reajuste fiscal en la producción y se supone que ésta se mantendría en el nivel pre reconfiguración-impositiva. De hecho, la evidencia de las colectivizaciones muestran que el ‘’capitalista’’ no es necesario para mantener la producción. Para el segundo caso, se ha asumido que se aplica un impuesto a los ricos del 80% , él nivel óptimo según Pikety y Saéz (2010).

En definitiva, las posibles ganancias que se abren para los catalanes tienden a superar las posibles pérdidas. En el análisis coste-beneficio hemos visto que es difícil que la operación financiera de la independencia arroje resultados negativos. Sólo en el caso de un castigo repentino y boicot tanto de España como de la UE, se podría pensar en una caída del 80%  del comercio bilateral en un periodo inferior a los 20 años. Aún así, ese dato sobre-estima el efecto negativo del aumento de la distancia, puesto que Cataluña conseguiría nuevos socios comerciales. Más importante aún, en el campo redistributivo pueden darse importantes mejoras si las clases populares son capaces de organizar un nuevo Estado Catalán controlado por el pueblo. El previsible auge de las CUP, ICV junto con iniciativas sociales como esta aquí  que se están viendo en los últimos años,  podría hacer que este fuese efectivamente el caso.

Acerca de Vicente Rios

Soy investigador de macroeconometría aplicada, especializado en paneles espaciales dinámicos y técnicas de model averaging. Actualmente trabajo en cuestiones de desigualdad, conflicto, crecimiento, instituciones y medio ambiente. Web personal: https://sites.google.com/view/vicenterios/home
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13 respuestas a ¿Quiénes ganan y quienes pierden con la Independencia de Cataluña? Un Análisis Económico

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  2. Mientras el pueblo no sea soberano y siga en manos de los políticos, ningún analisis sirve porque ellos se lo cargan todo y las culpas nos las facturan al pueblo soberano, que no decide nada. Sin embargo, si Cataluña iniciara un proceso constituyente anterior a la independencia, para redactar una Constitución con un Artículo principal otorgándole la soberanía total decisoria al pueblo soberano, quizás España lo copiara y entonces sobraría la independencia.

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  3. Te felicito por el análisis; pero la cantidad de obstáculos que le pondrán a la independencia, es inimaginable.

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  4. Ferderico dijo:

    … conseguiría nuevos socios comerciales … ¿de dónde?, si aún no lo tiene, ¿porqué va a obtenerlo después?, ¿se descubrirá otro planeta?

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  5. Pablot dijo:

    Muy buen análisis. Has sopesado la competitividad en relación a la situación geográfica?. Pongo un ejemplo, la Seat está en Barcelona, también al sede de Audi, imagino que España no renunciaría a esos ingresos, con lo que posiblemente competirían, no?.

    Es decir, es rentable para Audi o Seat tener la sede sólo en Catalunya?, o mejor dicho (porque seguramente, sí o sí, España querrá ese mercado, no hace falta que sea por un boicot), Audi pondrá una sede en cada zona?, si se fuerza un «concurso», donde puede ir?. Esto podría pasar con muchas multinacionales.

    Qué opinas de la hipótesis de que pueda ser un paraíso fiscal?, creo que eso es poco probable, no?, por la suma de su situación geográfica, población, renta per cápita, necesidad de infraestructuras… además que parece ser que los paraísos fiscales tienen fecha de caducidad… creo, no lo sé, el experto eres tú, yo soy solo una persona con mogollón de información y que no sabe muy bien como interpretar.

    Un saludo!!

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  6. Arlingtoniano dijo:

    Los socios comerciales ya estan ahi: el 60% de la inversion de los EEUU en España, 62% de la francesa, 61% de la alemana, 47% de la britanica, 54% de la italiana, y 70% de la inversion japonesa estan en Cataluña?

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  7. Hola, no soy yo el autor del post, pero en mi opinión la posibilidad de que Catalunya fuera un paraíso fiscal es muy improbable. Catalunya puede aspirar a ser mejores cosas que un paraísos fiscal, esa vía la descartaría de plano no solo por la poca ética de serlo sino, sobretodo porque para serlo te tienen que dejar el resto. Y si Catalunya tiene que lograr la legitimidad internacional, querer ser un paraíso fiscal no es la mejor decisión para lograr la aceptación de los países vecinos.

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  8. Pablot dijo:

    No me parece que federico esté muy acertado, pero se pueden sacar algunas ideas. Es decir, ahora mismo, esos socios lo son de España, no de Catalunya, aunque sea Catalunya la que haga el trabajo por el que se está comerciando, por así decirlo.

    En una independencia, crees que simplemente España perderá el cliente y ya?, no crees que querrá mantenerlo?. De entre España y Catalunya quien sería más competitivo?.

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  9. Arlingtoniano dijo:

    Los medios de comunicacion hablan de algunas multinaciones que se estan «largando» de Catalunya a Madrid, aunque parece que en realidad se estan reorganizando de cara a una posible secesion. Un ejemplo es la Coca Cola (Cobega). Cobega ha «salido» de Catalunya y se han transladado de Esplugues a Madrid… pero antes de salir han creado una subsidiaria en Catalunya. Cobega S.A. (Madrid) (que se podria haber llamado «Cobega Espanya») se encargara de los mercados de Espanya+Portugal. La subsidiaria Cobega Invest S.L. (que sigue en Esplugues, y que se podria haber llamado «Cobega Catalunya) se encarga de la distribucion en Catalunya y 15 paises mas.

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  10. Antonio dijo:

    Das muchos datos superfluos pero no entras a analizar en profundidad prácticamente nada. Supones que el saldo fiscal es favorable para Cataluña en términos de PIB como si tal medida fuera real cuando todos sabemos que se cocina convenientemente. Y ya lo que me parece un ejercicio de demagogia salvaje es el dar por hecho el que la independencia traerá un cambio en la redistribución de la riqueza en Cataluña, venga ya hombre! Ahora resulta que los oligarcas son todos españoles y se van a quedar solo los buenos catalanes. Cuando llegue la independencia, que estoy seguro que llegará, los oligarcas catalanes seguirán manteniendo su status quo, o incluso lo mejorarán al tener menor competencia. Y lo de las grandes multinacionales no tiene vuelta de hoja, tendrán una sede social en Cataluña para lo que allí vendan y otra en España para lo que allí se venda, faltaría más! Eso es lo que nunca se le cuenta a la gente. Haced números así y a ver el saldo fiscal hacia que lado se inclina.

    Buena suerte con esos nuevos socios comerciales, je je.

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  11. jose antonio delgado dijo:

    En Aragón no cabemos de gozo con esto de la independencia catalana. El regreso de capitales y el boicot generalizado a los productos catalanes creará una situación expansiva como ya ocurrió en la última independencia , la cubana, que trajo una inmensa bonanza a España y, por cierto, ninguna a Cuba. Le certifico que nadie comprará productos catalanes porque conozco a los aragoneses y antes se escacharían la cabeza con una pared que dar un centimo a esos miserables peseteros

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  12. jose antonio delgado dijo:

    Perdone amigo, pero si lo que usted dice de la independencia cubana es cierto, tal vez sea el propio gobierno español el que esté animando a los catalanes a a la independencia, ya que el regreso indiscutible de capitales y la solución del independentismo, al reparar el resto de comunidades en la quiebra catalana al poco de salir esta de españa, le daría prosperidad y estabilidad al resto de españa. Le recuerdo que un regreso manso de cataluña a España en 2025, como ya ocurrió en la crisis de 1649, sería una victoria sin paliativos de las oligarquías españolas, cuya victoria se alargaría quizá durante los próximos 80 años. No subestime ni a las oligarquias catalanas ni a las españolas, ni a la estulticia de las clases medias españolas y catalanas

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  13. Antonio Molina Peret dijo:

    Hay que apreciar un considerable esfuerzo por tu parte. Si quieres una critica constructiva, has mantenido demasiadas variables fijas. No entiendo lo de comparar el beneficio fiscal en un hipotetico caso de indepenndencia si la actividad se veria mermada significativamente. Creo que has dejado de lado la relocalizacion de empresas (y de trabajo) y no has entrado en detalle en esto y como afectaria esto al consumo interno de Cataluña.
    La Macro deberia de llamarse Micro-Macro, al final siempre es una consecuencia de la primera.

    Enhorabuena por el estudio!

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